lunes, 28 de febrero de 2011

Casa Grande de Vilanova, Remesar, Estrada, Galicia, España

Casa grande de Vilanova, Vilanova nº2 Remesar, 36685 A Estrada, Pontevedra, Galicia, España

Casa Grande de Vilanova, Remesar 

Esta casa rural está situada en la provincia de Pontevedra, concretamente en la parroquia de Remesar. Tiene a menos de 20 minutos la ciudad de A Estrada por la nacional N640 o el Pazo de Oca, permitiendo aprovechar su ubicación interesante en un entorno apartado y calma. La casa tiene más de 200 años y fue restaurada para dejarla en la actual configuración, siendo el resultado perfecto y acogedor. La casa es amplia y tranquila.

La casa tiene en la planta baja las salas comunes, en la primera planta las habitaciones de los visitantes, la última planta es reservada para el uso de los dueños. En las salas comunes disponemos de un salón acogedor con una chimenea, una biblioteca (pero para ser sincero durante mi estancia el fin de semana ni me plante leer un libro:-)), el comedor para el desayuno y la cocina donde no se tiene acceso.

Tenemos distintas habitaciones para los clientes, tuve la suerte de disponer de la habitación cuyo baño era impresionante y un verdadero privilegio. La casa dispone como accesorios de una amplia piscina exterior. El dueño es muy amable y disponible, muy accesible y dispuesto a proponer actividades o sitios que visitar. El desayuno si lo tomas es servido con música típica gallega por el dueño. Su composición es amplia y la porciones generosas.

Como punto negativo comentar que los dueños residen en la misma casa. Por lo que la estancia se parece más a un hotel rural, por si uno quería disfrutar de la casa exclusivamente y íntimamente con amigos por ejemplo no sería posible. La casa también tiene coto de pesca, lo que es interesante para apasionados de la pesca, y atrae pescadores aficionados en temporada.

Conclusión: una casa agradable que recomiendo, sobre todo si queremos disfrutar de la gastronomía estradense y visitar los Pazos de la zona, donde el Pazo de Oca es la estrella de la zona.



Casa Grande de Vilanova, RemesarCasa Grande de Vilanova, RemesarCasa Grande de Vilanova, RemesarCasa Grande de Vilanova, Remesar
Exterior de la casa.

Casa Grande de Vilanova, RemesarCasa Grande de Vilanova, RemesarCasa Grande de Vilanova, RemesarCasa Grande de Vilanova, Remesar
Interior de la casa.

Pros: casa agradable y cerca de los Pazos de la zona.

Contras: los dueños viven en la casa.

http://www.casagrandevilanova.com/

lunes, 21 de febrero de 2011

Restaurante La Taverne du Sergent Recruteur, Ile Saint Louis, Paris, Francía

La Taverne du Sergent Recruteur, 41 Rue St Louis en l'ile, 75004 Paris, Francia, Europa

restaurante La Taverne du Sergent Recruteur Paris

Una taberna típica francesa.

La Isla Saint Louis es un oasis de tranquilidad y lo más parecido a un pueblo. El coche no es el protagonista, y sus contadas calles muy agradables permiten al paseante disfrutar de la multitud de edificios y hoteles particulares. La Isla fue el origen de la ciudad de Paris (Lutece) y hoy en día es la residencia de los más pudientes (por el precio exorbitante de la vivienda). El principal encanto de la Isla reside en poder huir del ruido y del agobio de la capital, y pasear por sus bordes de Sena (quais) disfrutando de unas vistas insuperables.

Pero también la Isla tiene muy buenos restaurantes y con unos precios abordables, nada que ver con el precio de la vivienda. En la calle principal Saint Louis en l´Ile encontraremos tabernas rústicas donde disfrutar de los platos típicos de la comida tradicional francesa. Nos ancêtres les Gaulois o La taverne du Sergent Recruteur son los restaurantes más famosos y emblemáticos de la Isla, y son muy típicos. La Taverne du Sergent Recruteur lleva muchas años proponiendo una comida tradicional francesa con el concepto de la cantidad ilimitada para los entrantes y quesos, algo que sin duda fomento su éxito. Es ideal para llevar a extranjeros y que así prueben una gran parte de la gastronomía francesa, además de descubrir un sitio muy peculiar. Como la isla, la taberna sufre la invasión de los turistas atraídos por su originalidad, y esto puede a veces repercutir en el servicio y dañar el encanto original.

Un consejo: si no quieres sufrir el acoso de grupos y la multitud, y quieres disfrutar de un servicio atento, opta por ir entre semana y evitar las sorpresas de los fines de semana.

El restaurante tiene un comedor alargado al final del local. La decoración es tradicional y rústica, con mesas y sillas de madera y con adornos del siglo anterior. El sitio es agradable y su ubicación estupenda. El servicio fue atento y correcto pero reconozco que no fui en unas posibles fechas conflictivas. Algunos clientes como los ingleses a veces se quejan en la web del contenido de los platos, pero en mi opinión creo que los ingleses no son los mas apropiados para criticar sobre la gastronomía. El concepto del menú degustación de la taberna se basa en un bufet de entrantes y quesos sin ninguna limitación de cantidad. Nos sirven una bandeja de crudezas y embutidos franceses, donde cada uno se sirve hasta cansarse. Y con el queso pasa lo mismo, donde todos los quesos típicos franceses están representados. A todo esto se añade un plato principal a elegir, un postre, un café y una bebida.

Los entrantes se componen de una sopa, unos embutidos franceses, unas crudezas y una terrine de champagne (paté de campaña). Entre los embutidos destacar el salami, la mortadela, el chorizo y el salchichón. Los fanáticos de quesos podrán probar todas las facetas gustativas de los productos franceses y meterse un empache. El plato principal se puede escoger entre la variedad de platos típicos franceses como la carne a la parrilla, el pollo, el pato, el emincé de porc (cerdo con curry). Aconsejo probar el cassoulet, un plato gastronómico del Sur de Francia que se podría parecer a un guiso de alubias acompañada de carnes que me encantó. El menú degustación vale 40,50 euros por persona.

Sin duda, si tenemos la suerte de pasar por Paris, es un sitio ideal donde comer tranquilo y que disfruten nuestras papilas gustativas.

restaurante La Taverne du Sergent Recruteur Parisrestaurante La Taverne du Sergent Recruteur Paris
restaurante La Taverne du Sergent Recruteur Parisrestaurante La Taverne du Sergent Recruteur Paris

Comedor, cruzadas, cassoulet y quesos.

Pros: excelente ubicación y menú degustación con mucha cantidad y variedad.

lunes, 14 de febrero de 2011

Castillo Salvert, Neuillé, Valle del Loira, Francía

Château de Salvert, 49680 Neuille, Pays de la Loire, France

Castillo Salvert Neuillé



Francia no es solo Paris, la cuidad del amor. También tiene mucha diversidad en su clima, su geografía y sus habitantes. Tiene mucho por descubrir y cada región tiene su encanto y su particularidad.

Una de estas zonas privilegiadas es el Valle del Loira, donde siguiendo el curso del río Loira, se encuentran castillos como en Galicia encontramos casas rurales. Si España tuviera tantos pozos de petróleo como tiene el valle de Loira castillos, la crisis se acabaría. 

Esta zona llamada los Castillos del Loira, Chateaux de la Loire en francés, debe ser una parada y visita imprescindible. Además de admirar la arquitectura de los castillos, también la zona es un territorio de producción de vino. Por lo que aprovechas para visitar los castillos y también las bodegas que tienen. Así pruebas el vino del productor y te lo puedes comprar de recuerdo. 

También se come muy bien y a un precio muy económico, y parecidos a los precios practicados en España, quizá más barato. Nada que ver comparando con los precios de Paris. Está muy desarrollado el turismo y hay mucho donde elegir comer y dormir. La única diferencia con otros lugares es que escoges un Castillo en lugar de una casa rural.

Es necesario repetir las visitas porque no podrás abarcar con todo en una sola vez. En una de mis visitas por las ciudades de Chinon y Saumur, quise probar dormir en un castillo. Solo para comprobar que la revolución francesa había acabado con los privilegios, y un trabajador de clase obrera podía dormir en la casa de un noble. Y además que te sirviera la cena. 

Mi elección fue el castillo de Salvert y dormimos en una habitación del castillo. Valió la pena pedir la cena romántica aunque solo fuera para que me sirviera el dueño del Castillo. No es un restaurante, y se nota que lo intenta con muchos esfuerzos y dedicación pero no es un profesional. Lo más importante es cenar en el salón familiar del castillo con las velas encendidas, en un entorno completamente romántico. La comida es casera tradicional de la región con productos de productores. El confit de canard así como la terrina estaban muy ricas. También tiene cottages para alquilar, que son pisos independientes en casitas del recinto. 

Conclusión: es un buen sitio para dormir. Y aprovechar para visitar la zona. En la relación calidad-precio, la cena y la habitación son bastantes caras, pero es un capricho recomendable y no es desorbitante.

Castillo Salvert NeuilléCastillo Salvert NeuilléCastillo Salvert NeuilléCastillo Salvert NeuilléCastillo Salvert NeuilléCastillo Salvert Neuillé
Interiores y exteriores del Castillo Salvert.
 

Pros: la tranquilidad del entorno y la belleza del sitio. Facilidad de acceso a otros lugares de intereses de la región.
 
Contras: necesidad del coche para moverse y precios medio alto, pero elegimos un Castillo.


Links de interés:
Castillo Azay-le-rideau, Azay-le-rideau

lunes, 7 de febrero de 2011

Arroz con Bogavante

Ingredientes: Bogavante, pimiento rojo, ajo, cebolla,perejil, 3 tomates, concentrado de pescado, azafrán, langostinos y rape, 2 limones.

arroz con bogavante

Preparación:

Caldo de pescado: Pelamos los langostinos y echamos las cáscaras en un litro de agua con perejil. Añadimos 2 concentrados de pescado y calentamos el caldito.

Bogavante: Cogemos el bogavante vivo, y lo cortamos transversalmente. Lo pasamos a la plancha vuelta y vuelta 2 minutos con un poco de aceite de oliva. Lo quitamos y guardamos el jugo.

Arroz: En una olla de barro echamos el jugo y cebolla y ajo. Hacemos el sofrito unos 5 minutos.

arroz con bogavante

Después añadimos el pimiento rojo cortadito otros 5 minutos.

arroz con bogavante

Añadimos los tomates pelados y cortaditos con el rape y los langostinos.
Al poco rato de removerlo y hacerse (2/3 minutos), echamos el arroz y el bogavante.

arroz con bogavante

Echamos el agua colado del caldo hasta ahogar todo el contenido y dejamos cocerse 20 minutos.

arroz con bogavante

Una vez cocido añadimos los limones y servimos en la mesa donde dejamos descansar 5 minutos.

arroz con bogavante