Asador El Lagar de Isilla, c/ Isilla 18, 09400 Aranda de Duero, Burgos, Castilla y León, España.
El Lagar
de Isilla es un destino ideal para el viajante que quiera disfrutar de un
Lechazo acompañado de un buen vino en Aranda del Duero.
Este
asador se sitúa la calle Isilla en el centro de Aranda de Duero. Esta calle peatonal
de piedra nos lleva hasta las iglesias principales como la Iglesia de San Juan
o la Colegiata de Santa María. Además tiene muchas tiendas de comestibles (embutidos, quesos y carnes), tiendas de ropa y zapatos y sobretodo locales donde tomar el vermut y la caña.
Ubicado en
una bodega histórica que paró su actividad el siglo pasado, el local fue reformado
y habilitado para ejercer de restaurante. Hoy en día los propietarios de la Bodega de Isilla ofrecen un abanico de
productos para turistas como fines de semana enológico, un hotel, las visitas de
bodegas con los cursos de cata y venta de vinos asociados.
El Asador
tiene una barra y unas mesas al entrar que están siempre llenan a la hora del
tapeo y de los vinos. El comedor se encuentra al fondo de la sala donde pasaremos delante del horno de leña, también tiene otro comedor en
el primer piso.
La decoración como la gastronomía del local es típicamente Castellana. En el sótano tenemos la antigua Bodega que se puede visitar algunas
veces. La segunda vez que fui pude disfrutar de la visita.
Un
consejo: reservar
y comer temprano (antes de la 14h) para estar a gusto.
Bar y Comedor del Lagar de Isilla.
La comida se basa en el asado y los productos típicos castellanos y de
la región como los Boletos. El vino de la casa de producción propia propuesto
en el menú es bastante rico y sabroso. Proponen el menú castellano (muy extendido
en Aranda de Duero) compuesto de una sopa castellana o pastel de la Huerta (excelente), unos pinchos de morcilla y chorizo, una
ensalada de pimientos con bonito y anchoas, el lechazo acompañado de una ensalada, un milhojas de la casa (pastelería del grupo enfrente del restaurante) como postre, café con chupitos de Galicia (desde 2012) y la bebida (una botella de vino y otra de agua mineral para dos) por 34 euros por persona.
El servicio es bueno y agradable, pero reconozco que tuve suerte porque
siempre fui a las dos. El local siempre está muy abarrotado por lo que recomiendo evitar las horas
críticas y sus posibles daños colaterales. Otra recomendación es pedir el menú
y no intentar experimentos o cosas raras, uno se queda a gusto y disfruta.
Las
cantidades son suficientes y la relación precio calidad es buena si pedimos el menú. El lechazo está
rico y si tomamos el menú nos compensará.
Menú Castellano (Pastel de la huerta, pinchos de morcilla y chorizo, lechazo con ensalada, milhojas y chupitos).
Pros: Ubicación excelente y céntrica, el vino de la casa merece mención y es muy suave.
Contras: Éxito que lleva a
una explotación extrema que puede agobiar.
que buena pinta tiene ese lechazo
ResponderEliminarLo demás también sabe bien, te lo puedo asegurar...
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